Con el lema "Vida sí, aborto no", medio millón de personas salieron el pasado año por el mes de marzo a la calle para manifestarse. Los manifestantes fueron convocados por Derecho a Vivir (DAV), HazteOir.org, Médicos por la Vida y Grupo Provida Madrid para manifestarse contra la reforma de la Ley del Aborto.
Y es que, plantearse la decisión de abortar significa que has cometido un error, un descuido o también te puede haber ocurrido un suceso muy fortuito y desagradable, como en los casos de abuso sexual. Esto último es verdaderamente preocupante ya que parece que en España se producen nada más y nada menos que 5.664 de casos de abuso sexual por año y sin contar los casos que no son reportados. Eso significa que se produce una media de 15 violaciones al día. Demasiadas, y es posible que la maldad no termine ahí, puede que la amargura dure toda la vida con el nacimiento de un niño que no ha nacido por voluntad de la madre, ni por el amor de una pareja, no, sino por un crimen. Un hecho así es imposible de olvidar, pero, aún se puede tomar una decisión para que este hecho no pase tanta factura en esa persona.
Una decisión como ésta es de las que de verdad pueden dar un giro brusco en tu vida, es por eso que la persona directamente afectada debe sentirse totalmente libre para meditar ésta decisión y no verse coaccionada por instituciones como la iglesia. Sinceramente, me parece que la mayoría de personas que están totalmente en contra del aborto no se han puesto en la piel de la persona afectada, ¿acaso a ellos les gustaría dar a luz y mantener un niño que es fruto de una violación? No obstante, si la causa es sólo por un descuido en una pareja estable y bien asentada económicamente me parece que la pareja debe afrontarlo y tener el niño ya que puede tenerlo todo.
Es por eso, que para que se le permita a la persona abortar deben de cumplir una serie de condiciones. También hay que examinar uno por uno todos los casos y meterse en la piel de la persona directamente afectada, que es la que de verdad tiene vida.
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